Cuando un niño es muy inquieto, intente que pinte un mandala, que lo pinte de afuera hacia adentro, rellenando los espacio con colores vivos, sumándole, estrellitas, polvo de colores, escarcha, o cualquier otra cosa que se le ocurra que de sensación de luz, asi... con gran sorpresa, Usted encontrará que su niño se calmará.
Generalmente los niños inquietos, requieren más entretenimiento, gastar sus energías, inténtelo con los mandalas, pintándolos de afuera hacia adentro.
Cuando los chicos sean introvertidos, inviertan la situación con el mandala, que lo pinten de adentro hacia afuera, en las mismas circustancias, con colores claros, pasteles, brillantes y..... observe, lo fácil que puede manejar la situación, sin gritos, sin empujones y.... Todo el mundo feliz.
Decia que funciona para niños grandes y pequeños, cuando me refiero a los grandes, me refiero a los adultos. Funciona de la misma forma; si estás muy inquieto, pinta los mandalas de afuera hacia adentro, con muchos, muchos colores, como si fueras un artista y estuvieras preparando tu mejor obra de arte; si estás triste o deprimido, hazlo al contrario, de adentro hacia afuera, ponle muchos, muchos colores, pinta, uno, dos, o los que sean necesarios, hasta que tu ánimo retorne a su naturaleza normal.
Ensayen y me cuentan...
Buen fin de semana
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